SIGUEN RUIDOS Y DENUNCIAS POR EL MALECÓN DEL MAR

 

El proyecto Malecón del Mar inició y sigue avanzando con mucho ruido de amiguismo y corrupción, según las denuncias de lideres cívicos y el concejal de la oposición se publicó en el SECOP sin los diseños de las obras y sin que se conocieran los estudios, y hubo retrasos en el cronograma. Y al momento de adjudicarlo hubo un solo proponente habilitado: el consorcio liderado por DINACOL.

 

Como contó el portal LA CONTRATOPEDIA, también hubo suspicacia por un cambio en los requisitos después de la publicación del proceso. La Alcaldía incluyó como requisito una licencia que otorga la Dirección General Marítima (Dimar). Esa es una licencia que tenía DINACOL desde 2009.

 

Para expertos en contratación pública esa es una mala práctica. El expresidente de la Sociedad de Ingenieros de Bucaramanga, Rodrigo Fernández, dijo que “pretender que un potencial oferente cuente con licencia de explotación comercial otorgada por la Dimar es un amarre y un requisito, que debió surtir el contratante antes de convocar”.

 

No es la primera empresa cercana a Turbay que gana contratos. La empresa del exfuncionario de Infraestructura de Turbay en Bolívar ganó un contrato 2.281 millones para mejorar un coliseo deportivo, como reveló LA CONTRATOPEDIA.

 

Las ambiciosas y millonarias obras tendrán que superar los ruidos iniciales en los procesos de contratación. Las primeras advertencias surgen por retrasos en la publicación de los estudios y diseños, por falta de claridad en el origen de los presupuestos y por contrataciones que no tienen todos los avales. Es algo que contrasta con la imagen de gran ejecutor que Turbay ha intentado proyectar, especialmente después de la administración de William Dau, un veedor anticorrupción que terminó criticado por su falta de gestión debido al miedo de contratar.

FUERTES VIENTOS POLITICOS

Además, los vientos políticos en Cartagena podrían cambiar. En su primer año, Turbay lidió con el hostil mundo político cartagenero dándole espacios en el gabinete, y mantuvo a los clanes locales, y hasta el Concejo alineados, por no decir arrodillados. Pero con las elecciones del Congreso a 10 meses ya empieza la turbulencia, y una prueba de fuego; ya ha habido tensiones que amenazan esa paz política que le ha permitido gobernar al alcalde con poca oposición, ya que se sabe que Turbay Paz, al sentirse libre de marca politica, quiere llevar sus propios alfiles a Cámara y Senado, restándole oportunoidades a los grupos tradicionales, que ya lo empiezan a ver con malos ojos.